Un monoambiente de 53 metros² con decoración estilo industrial moderno que se asemeja mucho a los típicos lofts neoyorkinos.
Techos altos, grandes ventanales, espacios abiertos y amplios, caños de agua y ventilación a la vista se incorporan naturalmente al diseño de la vivienda, con grandes ventanales de hierro y vidrio repartido que se extienden hasta el techo y aportan una increíble cantidad de luz al interior del monoambiente. El blanco elegido para las paredes junto a los pisos de cemento alisado en gris claro contribuyen a que la vivienda sea más luminosa todavía y unifican los distintos sectores funcionales.
El área del living está compuesta por un sillón de 3 cuerpos de diseño escandinavo, una Eames Rocking Chair y un original baúl metálico antiguo como mesa de centro, que en conjunto crean un estilo moderno-vintage para este sector. La bandera en la pared sobre el sillón aporta colores diferentes a la ambientación y crea un punto focal importante.
En ambos lados del sillón, plantas de interior en macetas blancas brillantes ayudan a sectorizar el área del living y diferenciarlo de la cocina que se encuentra al lado.
La cantidad de objetos apoyados directamente en el piso como algunos cuadros, las cajas de madera al lado del sillón, los zapatos frente a la cama, etc. hacen del ambiente un lugar más informal y relajado.
El área del dormitorio se encuentra en el extremo opuesto a la del living y también se beneficia de la luz natural proveniente de los grandes ventanales. La cama ubicada en un rincón libera espacio que se utilizó para colocar un escritorio con patas metálicas en color negro y tapa blanca con cajones en madera oscura. Bajo la ventana, un mueble bajo de Ikea modelo PS, en metal pintado de blanco sirve como espacio de guardado adicional y base de apoyo para la TV.
Aprovechando el espacio entre la cama y la puerta del cuarto de baño se colocó un mueble estanería de madera y metal que funciona como biblioteca y permite disponer objetos decorativos varios y un antiguo tocadiscos. Los muebles en metal resaltan el carácter industrial de la decoración del monoambiente.
La nota de color en el sector del dormitorio la dan los diferentes banderines colgados en la pared, una manera sutil de agregar un punto focal a bajo costo.
La cocina está ubicada junto a la puerta de entrada del monoambiente. Su diseño lineal aprovecha perfectamente el área de paso y permite disponer de todos los elementos necesarios para cocinar cómodamente. Los muebles de cocina con terminación simil madera hacen que el espacio sea mucho más interesante visualmente. La cocina, pileta y heladera en acero inoxidable suman la cuota industrial a la decoración. La mesada blanca de Silestone aporta un color diferente.
Las cañerías y tubos de ventilación que se encuentran en el techo fueron pintados de blanco para que se asimilen mejor a la decoración. Este tipo de detalles aportan un característico estilo loft a cualquier ambientación.
La pared de la cocina y la alzada fueron revestidas con cerámicos grises al estilo subway tile. Sobre la mesada, dos estantes de distinto tamaño permiten tener a mano los elementos básicos de la cocina a la vez que aportan un poco de color.
Plano del monoambiente
