Decoración de un departamento pequeño en estilo escandinavo con mucho estilo. En cada rincón encontramos un conjunto de cuadros, la mayoría en blanco y negro que dan personalidad a los ambientes.
Destaca como punto focal la pared decorada con grandes y pequeños cuadros dispuestos irregularmente y consolas de Ikea amuradas en el comedor. Allí mismo, sobre la mesa, una lámpara colgante Random de Moooi pasa inadvertida sin bloquear la vista.
En la pared opuesta, ya en el área del living, una biblioteca repleta de libros da color y complementa la decoración con cuadros.
En la cocina blanca y sencilla, de líneas modernas, se dispusieron como arte una serie de platos redondos.
El dormitorio es muy sobrio, repitiendo la decoración en blanco y negro dada por los cuadros ubicados sobre la cómoda laqueada en blanco.